El señor, Demesio Argüelles Balderas quien es oriundo del Ejido Armenta en Altamira, denunció que los servidores de la nación han dejado en el desamparo a los abuelitos de la zona rural de este municipio.
Relató que, meses atrás acudieron a levantar un censo a su comunidad, sin embargo, al día de hoy no han recibido ningún tipo de apoyo por parte de la Federación, lo que se complica aún más al haber veda electoral.
Mencionó que así como él, en esta zona ejidal de ALT rueda hay aproximadamente 70 abuelitos con alguna discapacidad física y la gran mayoría no tiene acceso a un apoyo gubernamental.
«No han cumplido con los discapacitados, con las tarjetas de apoyo, yo fui uno a los cuales no les llegó la tarjeta del gobierno federal, en los ranchos los discapacitados no hay quien los atienda, no hay ni despensas».
Demesio Argüelles, es un señor de la tercera edad, el que hace uso de una vieja silla de ruedas para trasladarse de un lugar a otro, él, se quedó desempleado por su discapacidad, pero eso no es impedimento para que día a día salga a trabajar en la venta de ropa en el ejido la Pedrera de la Urbe Industrial.
Este abuelito, menciona que los residentes del Ejido Armenta día a día viven una odisea para entrar y salir toda vez que no hay transporte colectivo, situación que los pone contra la espada y la pared, pues, al no obtener apoyos, se ven forzados a buscar la forma de generar ingresos de manera informal.
Don Demesio Argüelles afirmó cabizbajo, que al no tener dinero, los residentes del ejido se ven forzados a pescar en una laguna cercana, misma que se encuentra contaminada.
«Nadie nos apoya, las aguas están contaminadas en el ejido Armenta, los pescados están echados a perder, pero así se los come la gente ya que tenemos hambre».